Posts etiquetados ‘violencia de genero’

Hay días en los que sentarse e intentar contar alguna cosa en este púlpito resulta muy complicado. Muchos lo sabréis, sabréis lo complicado que resulta intentar escribir algo coherente porque se te ha metido la cabeza en una especie de estado shock que te lleva a quedarte en blanco. Seguro que has sentido esa sensación, es horrible.

Pues exactamente así estoy yo ahora, en plena fobia al folio en blanco con una extraña mezcla de rabia, estupefacción y perplejidad que me han dejado paralizado como un gato ante los focos de un coche. Siempre pensamos que lo que sale por la tele sucede “en otros lugares”, ya se que no es así porque donde yo estoy también es un lugar como otro cualquiera. Igual esa sensación es algún tipo de método de defensa que usa nuestro cerebro para sentirse más seguro, se lo preguntaré a mi psicóloga de cabecera. Pero al final sucede que llega un momento en el que se te cae el castillo y te das cuenta que la barbaridad no está sólo en Ucrania, en Madrid o en Valdemorillo de la Sierra. También puede esconderse en tu pueblo, en tu escalera o incluso más cerca, en ese momento te planteas muchas cosas.

Verás, resulta que el domingo se cometió otro de los crímenes abyectos que evidencia que puede que pertenezcamos a la peor de las especies que pueblan el planeta. Un sujeto asesinó a su hijo, otro caso de violencia vicaria, otro más de los que aparecen en las noticias, que nos llenan de horror hasta que la noticia de después vuelve a horrorizarnos en una sucesión de espantos que nos lleva a pensar que todo está perdido. Pero claro, cuando te has cruzado por la calle con los implicados, cuando has podido hablar con ellos, cuando les pones cara, voz y cuerpo la cosa cambia parece que toma otra dimensión y duele, sientes rabia, mucha rabia.

Es difícil entender, por lo menos para mí, que pueda existir tanta violencia en pleno SXXI. Igual es que soy cortito porque viendo hace un rato a Zelenski hablar a sus señorías de las similitudes entre Guernika y Mariupol me parece tiene razón el presidente ucraniano, no hemos mejorado mucho desde entonces. Pero como decía, si es difícil entender como todavía después de lo vivido recurrimos a los bombazos, más me cortocicuita el cerebro entender como se repiten una y otra vez, hasta niveles pandémicos, la violencia de genero y que encima existan negacionistas al respecto ya es alucinante.

Pero todavía existe un sótano más en el infierno de la violencia de género, la violencia vicaria ¿De verdad puede existir alguna alimaña de dos patas tan insensible e irracional como para asesinar a su propio hijo solo por hacer daño? ¿De verdad que es capaz de no sentir nada por él? Pues lo hizo, acabó con la vida de su hijo a cuchilladas y se quedó a ver el efecto de su obra. Si alguien no es capaz de sentir empatía ni por su propio hijo no se si ese alguien puede considerarse perteneciente a la especie humana y claro ¿Cómo podemos defendernos de semejantes bestias inmundas? Parece que en este caso los engranajes de la justicia han fallado, una vez más, igual deberíamos pensar de una vez que está fallando para que ni siquiera dos juzgados sean capaces de estar intercomunicados entre sí. Puede que si quitásemos ya el polvo a la máquina judicial se salvase otra vida porque decir “antes de que sea tarde” es insultar a tantos que ya no están y a tantas familias rotas por el dolor. Les debemos acabar con esto.

Perdóname hoy pero ya te digo, mi cabeza está en otro sitio. Lleva dos días a dos manzanas de mi casa. Hoy es un día de esos que piensas que lo que me enseñaron en la facultad no funciona porque es incapaz de parar la barbarie de los animales con forma humana que viven entre nosotros. Mañana supongo que ya podré pensar de otra manera, sacar de mi cabeza las ideas del ojo por ojo que todos tenemos alguna vez y poder darme cuenta de que más vale justicia coja que la ley de la selva. Eso es lo que nos diferencia de las alimañas sin nombre que andan sueltas.

Si, ya se que el 8 de Marzo ya ha pasado y puede que pienses que llego tarde pero con todo este guión propio de películas de zombies postapocalípticos que estamos viviendo, 8m-2020-SLIDEok.jpgeste año propondría que se repitiesen las manifestaciones y los actos revindicativos porque igual, con eso de que sólo hablamos “del bicho” por todas partes nos hemos enterado mucho menos que otros años, igual porque por los medios andan ocupados en otros menesteres. Pero ¿Crees de verdad que con todo lo que nos está pasando el Día de la Mujer se puede reducir a un día en el que se sale a la calle para pedir algo que a estas alturas del S.XXI debiera haberse conseguido ya hace siglos?

Nuestras compañeras  no nos piden nada a pesar de que nos han demostrado de nuevo que puede que sean el sector más dinamizador en esta sociedad en la que demasiada gente se queda mirando las musarañas. Tan solo quieren lo que es suyo, cosas tan obvias como que las consideremos iguales, que las dejen vivir en paz y que acabe de una vez el img_oribalta_20200305-150459_imagenes_lv_otras_fuentes_8-marzo-2020-directo1-424-kNfE-U4740166716529fC-992x558@LaVanguardia-Web.jpgrosario de violencia, muertes y amenazas que vivimos. Son unas pretensiones que no son propias sólo de ellas sino que debieran ser de toda persona que se precie de pertenecer a la especie humana. ¿Tan dificil resulta? Pues parece ser que sí porque todavía este año, entre coronavirus y resfriados, pudimos oír voces neolíticas (de los señores con nombre de diccionario y de otros más, no vayas a pensar) poniendo en duda sus revindicaciones ¿ Y sabes una cosa? Que algunas voces salían de bocas femeninas, no se en que planeta viven pero¡es como para exiliarse al desierto de Gobi!

Hemos pasado ya el día 8 de Marzo pero la lucha continua, no puede acabar hasta que no consigamos que la mitad de la especie humana deje de sufrir estigma por pertenecer al Web-8M-2020-1.jpgsexo femenino (lo ideal sería que NADIE en toda la especie sufriese por pertenecer a la opción sexual que le de la gana, lo conseguiremos). Nuestras voces no puede callar el día 9, ni el 10, no nos podemos permitir ni un minuto de descanso hasta que acaben las muertes y las amenazas, hasta que el “la maté porque era mía” no desaparezca de la galaxia, hasta que ser mujer no signifique salir de la casilla de atrás. Es por eso por lo que os felicito por vuestra lucha, el día 8 o el que sea porque hasta que se consiga el fin de una epidemia que supera con mucho en muerte y dolor al mantra del coronavirus, todos los días debieran ser el día de la mujer, así a secas, porque mujeres trabajadoras lo son todas. Estoy convencido de que al final la lucha dará sus frutos y nuestras hijas podrán leer lo que está ocurriendo en los libros de historia y poner cara de asombro sabiendo que la prehistoria acabó.

Pero eso no se va a conseguir sin la ayuda de todos, porque el futuro es de todos, no es mío ni tuyo. Lo que ocurrirá mañana va a ser resultado de lo que hagamos hoy tanto como que si no plantas un manzano no pidas limones. No lo olvides, levántate del sillón y únete a intentar hacer un mundo más habitable para tod@s.

huelga-8-marzo-720x266.jpg

 

Igual no te has enterado de que este jueves hay convocada una huelga de las mujeres. Espero, de todo corazón, que sea un gran campanazo, un golpe, un basta ya que nos IMG_20180304_140338.jpgmeta a todos en la cabeza (sin distinción de género) que nuestras compañeras ya están hartas de ser discriminadas, cosificadas, maltratadas o hasta asesinadas a pesar de ser más del 50% de la población mundial. Creo que ha llegado el momento de escribir una nueva historia en las relaciones hombre-mujer en el que se acabe de una vez con la vieja historia en la que ellas estaban encerradas en casa, limpiaban, lavaban, planchaban para su familia siempre detrás de la figura de “pater familias” (con bigote, of course) que conjugaba sus obligaciones domésticas con el verbo “ayudar”. La historia dio un paso adelante con la entrada de la mujer en el “mercado laboral” que décadas después sigue impregnado por el machismo que todo lo abarca. Algun@ pensaban que con que ellas pudiesen trabajar acababa la historia, pero de eso nada, la igualdad no es efectiva, queda mucho camino por delante.

Ha llegado el momento de dar el paso a pesar de que algunas señoronas ni siquiera sean Women-Of-The-World-Unité-768x513.jpgcapaces de ver su condición de mujeres y se dediquen a sabotear con sus declaraciones vergonzantes que no persiguen más que desacreditar la grandeza de la convocatoria y, de paso, enfrentarnos los hombres a las mujeres en base a un discurso falso e interesado. Se retratan, y la verdad es que la imagen es horrenda. Me paro a pensar que si yo he sentido vergüenza de escuchar a Cifuentes&Cia, no puedo ni imaginar lo que habrán sentido mis compañeras de trabajo.

Creo que nuestras compañeras no pretenden apartar a los hombres (como he oído IMG_20180304_140715.jpgdemasiadas veces estos días) simplemente nos piden no ser más iguales que el día anterior, sino ser absolutamente iguales. Dejar atrás la discriminación salarial, la ofensa, el insulto, el mansplaining y los tiempos en los que te encuentras con una chica por la calle, en mitad de la noche y notas como se aferra a las llaves de casa con cierto temor. Lo entiendo perfectamente, las cifras de la Violencia de Género son aplastantes.

Ha llegado el momento de que sean ellas las que nos desestabilicen los esquemas. Es IMG_20180304_140729.jpgnecesario porque con el silencio y la obediencia jamás se ha conseguido nada y si quieren que sus pretensiones sean un éxito merecido hará falta mucho poder contestatario, son demasiados siglos de corsé y llantos encerrados en la cocina. Llegó el momento para que ellas nos griten BASTA YA tan fuerte que tiemblen los cimientos de esta sociedad que ya necesita un buen cambio de raíz.

¿Pero que podemos hacer los hombres en esta huelga? En primer lugar tomarnos en serio IMG_20180304_140651.jpgla apuesta siendo lo suficientemente civilizados como para sentarnos a comprender el momento histórico en el que estamos y respetarlas, sobre todo respetar la lucha DE ELLAS sin querer convertirte en protagonista (caballero, es una huelga de mujeres y son ellas las que decidirán nuestro papel) y entender que este día 8, más que nunca debemos trabajar, trabajar para que este podrido sistema les pueda permitir hacer una huelga visible, histórica y que su clamor se oiga fuera del sistema solar. Sólo así todo podrá cambiar y podremos empezar a construir una sociedad igualitaria de la que nuestros hij@s puedan sentir orgullo. Ganaremos tod@s.

7 de Julio de 2016, CINCO individuos, presuntamente, violan a una joven y se jactan de ello. Existen pruebas que parecen concluyentes, vídeos, whatsapps y nosecuantas cosas más. Todo clama al cielo pero aunque se nos pase por la cabeza olvidar por un rato la existencia del Código Penal. Esto, por suerte, no funciona así y debemos esperar a ver que dice la justicia (espero que les diga, y mucho, si se demuestran culpables). Este tipo de noticias, por desgracia, cada vez son más frecuentes. Demasiado como para no ponerle freno inmediato.

Los hechos dejan claro que algo no está funcionando. Son actos terroríficos y más todavía por eso del grupo. A mí me asalta una duda. ¿Cómo es posible que se puedan cometer estas barbaridades en comandita? ¿Cómo puede ser que se reúnan una panda de depravados para cometer estas bestialidades? Supongo que eso de cometer los crímenes en grupo no creo que sea con la intención de hacer más «brutal» el crimen. Más bien será cosa de cobardía porque eso de ampararse en el anonimato del grupo les hace sentirse “más valientes” y «menos culpables». No se a vosotros pero a mi se me hace más execrable el crimen.

Me horroriza admitir que puede existir en algún pliegue escondido y remoto del cerebro masculino la idea esa de juraque ser «hombre» implica ser más salvaje que el resto de los «machos» de la manada. En otros tiempos supongo que hacías la mili y te bestializaban un rato o algo por el estilo para volverte “hombre” (No lo se, fui uno de esos objetores de conciencia que llegamos a bordear la legalidad). Todavía parece que algunos descerebrados no han aprendido que lo único que hay que demostrar es el cariño a los que amas y el respeto al resto. Si eso fuese así otro gallo nos cantaría ¿verdad?

Pero existe otro tipo de criminal igual o más peligroso, el que se esconde puertas adentro, en casa. Se cree con barceloderechos propios de otros siglos, copiados de cuando aquella «Guia de la Buena Esposa» de Pilar Primo de Rivera para hacer de la hostia y el abuso su forma de diálogo. Suelen ser los que no saben donde está la cocina y buscan el puerto USB para cargar la batería de la escoba, se creen superiores, el «majarajá» de la casa. Pero el caso es que la mayoría antes no eran así, se han ido construyendo con el paso del tiempo, la cosificación de las mujeres en los anuncios, la tele o el cine y el haberles hecho creer de sangre azul dentro de casa. Puede.

El «Homo violator” necesita contar sus fechorías en el bar o a sus amigotes para buscar la aprobación general. Algo moeque consiguen cuando, en muchos casos, en lugar de llevarlo a collejas hasta la comisaría más cercana se callan y retroalimentan involuntariamente la idea rara esa del salvaje de que cree defender a los HOMBRES (así en mayúsculas y en general) frente a la amenaza de «lo femenino». Lamentable pero cierto.

Necesitamos gritarles NO, a la cara y mostrar nuestro rechazo hacia los que hacen la vida imposible a nuestras compañeras. Nos hace falta que nos ayudéis a dejarles claro que nos humillan, que nos hacen sentir vergüenza de nuestro propio género. Nos están llevando a una situación en la que parece que nos han de tratar como bestias salvajes que se guían por impulsos irrefrenables, algo que se manifiesta en la inquietud de nuestras compañeras al quedarse solas entre varios hombres en un vagón de tren y no al revés.

Como perteneciente al género masculino pido que no se me integre en el colectivo de bestias descerebradas que a manual_buena-_esposa.jpgestas alturas de la evolución de la especie son incapaces de comportarse como humanos y siguen gruñendo en las cuevas. Pensad que pertenecemos a la misma especie y los especímenes masculinos también sabemos comportarnos y  no merecemos el recelo generalizado. Aunque admito que lo entiendo, visto que la mayoría de las bestias que se han infiltrado entre la especie humana han adoptado un cuerpo masculino.

El otro día comentábamos (más bien tecleábamos) la amiga Ana (@pollitalus) y yo mismo un suceso de esos que pasan por las noticias de puntillas pero que en realidad son importantes para entender porque nos ocurren cosas surrealistas día sí, día también. Resulta que al final, y después de ponerle mucho suspense al asunto, el Gobierno en funciones (como si salmeron_15651_11hubiese funcionado alguna vez) se decidió a conceder un “indulto parcial” (parcial porque parece ser que sólo se pidió en cuanto a una sentencia de las varias que amontona) a Maria Salmerón, una madre que se limitó a defender a su hija de un maltratador condenado al que no se le retiró el régimen de visitas a pesar de la condena por un rosario de malos tratos físicos y psicológicos a la madre. Un indulto sobre algo que no debió llegar nunca a ese punto y que se le concedió con el desdén del que es capaz el “pijo muchimillonario” que tira cincuenta céntimos de limosna al pobre de la esquina “para que no moleste”.

El caso es que María y su ex maltratador tienen una hija, una chica de 15 años, a la que también el juez podía haber preguntado al respecto. La niña, naturalmente, no quería acercarse a su padre ni para pedirle machismo-2la hora, a lo que la madre accedió porque seguro que tenía miedo y no esperaba nada bueno del sujeto. Estoy convencido de que hubieses hecho lo mismo. ¿Acaso no queremos evitar el sufrimiento de nuestros propios hijos, pese a quién pese?¿No es lógico que la madre tenga miedo y quiera proteger a la niña de algo que puede hacerle, también a ella, mucho daño? Casos hemos tenido un montón y por desgracia no parece que vaya a tener remedio, por lo menos a corto plazo, visto que vivimos en un país en el que se convocan concentraciones machistas y nos tomamos a broma eso de que se empiece a llamar “Feminazis” a las mujeres que defienden lo que les corresponde.

Pues bueno, al final a María le cayeron 7 meses y debía ingresar en prisión porque además de esta tenía lobovarias condenas por el mismo asunto. Ella se negaba a entregar a la niña y el padre atormentador se ponía el disfraz de víctima afligida y corría al juzgado a interponer la consiguiente demanda, que se ponía a la cola para mayor retorcimiento de la madre que sumaba condenas como quién acumula puntos en la Travel Club. ¿Es eso justo? Como decía Ana, no es posible entender que si un animal defiende a su camada nos enternezcamos y en cambio si es una madre la que lo hace con sus hijos, acabe en prisión.

Parece ser que en este caso (y en tantos otros) la justicia es todo menos eso, justa. Se limita a aplicar las leyes sin pararse a pensar que no hace más que ensañarse en el dolor en lugar de mitigarlo. Cuando esto es así nos damos cuenta de que algo no funciona como debe.

No funciona porque parece que no aprendimos nada de cuando se procesaron jueces en Nuremberg por nurembergaplicar el Derecho Nazi sin pensar que lo que aplicaban era bárbaro y perverso, pero vigente en la época negra. Tan vigente entonces como nuestro actual Código Penal. Pero no voy a meterme en discursos sobre la eterna guerra entre el positivismo y el iusnaturalismo, para eso ya tenemos verdaderas eminencias en la materia a un tuit de distancia (adelantos de la técnica, yo me tuve que enrolar en la facultad de derecho) Seguro que uno de los mejores, el profesor Xavier de Lucas (@xdelucas) que nos puede iluminar mucho al respecto.

Nuestra justicia, en muchos casos, se dedica a aplicar códigos sin pensar en las consecuencias. Vivimos moisesun sistema judicial un tanto desnaturalizado en el que la mayoría de los jueces actúan como autómatas. Ya nadie se acuerda de Hobbes, Locke o Platón y puede que por eso a menudo se aplica la ley estricta como quién aprieta un botón, fríamente sin pensar siquiera en que el Derecho es algo más que un amasijo de leyes y que la justicia muchas veces no sólo ha de ser justa sino que además parecerlo (lo más complicado de todo). El oficio de juzgar no debiera ser como el Quimicefa, aplicar fórmulas para tener un resultado. Es algo niunamenoscreativo que muchas veces obliga al juez a hacer de equilibrista del Cirque Du Soleil entre lo que es justo y lo que dice la ley porque lo que tiene en sus manos son las vidas de personas con una historia particular detrás y las soluciones “a granel” no son válidas. Pero la verdad es que, como todo, muchas veces se ha reducido todo a “yo digo esto que es lo que dice el manual y evito líos”. Tenemos jueces para evitar eso, para que piensen y decidan sobre lo correcto y hagan lo que se espera de la justicia, resolver conflictos entre personas, no crearlos. De no ser así igual mejor los sustituimos por máquinas expendedoras de resoluciones y se acabó el asunto “su sentencia… gracias”.

No, hoy no es el día de la mujer (¿hace falta para que nos acordemos de ellas?) pero a juzgar por las lamentables y espantosas noticias que vemos a diario,  parece que aún vivamos en el Paleolítico Superior en pleno Siglo XXI. El otro día se convocó otra jornada de protesta para reclamar el derecho de las mujeres a conducir, cosa que no parece tan aceptada porque algún que otro jeque se ha pasado tres pueblos.

El jeque en cuestión, Saleh al-Luhaidan, miembro del Consejo Superior de Ulemas, decía, sin 207098aportar pruebas, en una entrevista que «Si una mujer conduce un coche, no por pura necesidad, podría tener efectos fisiológicos negativos (…) ya que afecta a los ovarios y empuja la pelvis hacia arriba”. Según él las mujeres sólo conducirían en “circunstancias justificadas” como la enfermedad de su marido durante el viaje. ¡Toma ya! Ojiplático me quedo

El caso es que en Arabia Saudí, uno de esos lugares con una sociedad religiosa anacrónica disfrazada de modernidad, petroleo y lujo, varias conductoras han sido detenidas y liberadas después de firmar un compromiso de no volver a conducir, algo así como el “no volverá a ocurrir” borbónico. Otras, como Shayma Ghassaniya, fueron sentenciadas a recibir diez latigazos (que al final fueron revocados).

¿Ah, que esto nos queda lejos? Pues en todas partes cuecen habas. Diría yo que la editorial del Arzobispado de Granada está en eso de superar al jeque con la edición de un libro titulado «Cásate y sé sumisa» (encima escrito por una mujer, Costanza Miriano) en el que defiende que la mujer debe “aprender la obediencia leal y generosa, la sumisión” para poder ser “feliz INCLUSO con su marido”, manda narices!.

Dejar pasar estas cosas puede que sea una de las causas que llevan a que aquí se vivan cosas mucho más lamentables. Me refiero, sin duda, a las más de 700 mujeres asesinadas por violencia de género en España, ayer mismo la última, muertes que se debieran haber evitado la última década, una cifra horrible, sólo comparable a las del terrorismo, más «mediáticas» marmita2pero también lamentables. A mi, y supongo que a todos, me hierve la sangre a fuego lento leer que nuestros gobiernos psicópatas en vez de legislar eficazmente, para evitar esta sangría, subvencionan a centros que segregan por sexos o consienten la diferencia salarial, pues oye, esas cosas me alteran las meninges. Además, es alucinante leer “perlas” tales como las injerencias de Gallardón en materia de abortos, sin recato ninguno y lo que ya no tiene nombre son las salvajadas pronunciadas por mujeres, en puestos de relevancia, retrógradas, machistas, que parecen avergonzarse de su própio género. Inexplicablemente me viene a la cabeza Esperanza Aguirre diciendo aquello de “el aborto no es un Derecho sino un FRACASO de la mujer en todos los supuestos” , muy propio de la Edad Media, si señora, ni Torquemada lo hubiese dicho mejor.

No debiéramos consentir que se emprenda ese camino, ni desde la política, ni desde el arzobispado y mucho menos desde el mundo de la cultura, lo siento por Perez Reverte y su ROSIE THE RIVETERlamentable “Mujeres como las de antes” (caballero, una mala tarde la tiene cualquiera). Porque si no conseguimos educarnos en la igualdad, en menos que canta un gallo regresaremos a la cuando las mujeres no salían de la cocina y no conseguían jamás la mayoría de edad. Entonces de nada habrá valido la lucha de nuestras compañeras quienes nos demuestran todos los días que siguen con nosotros, a pesar de los milenios de injusticias cometidas sobre ellas. Nos enseñan que su valía es, como mínimo, igual a la nuestra.

Esta vez no han de quedarse solas, todos tenemos mucho que perder. No hablamos ya sólo la segregación de los géneros, hablamos también del retroceso cultural, la vuelta a la barbaridad, con todo lo que ello conllevaría en cuanto a destrucción de derechos y garantías no sólo los de ellas sino los de todos.

El 016, el teléfono confidencial para maltratadas que no deja huella

¿Cómo actuar ante un caso de violencia?

700 mujeres asesinadas en España en la última década en crímenes de violencia de género

Unas 55.000 maltratadas están en situación de «riesgo medio, alto y extremo», según la policía

El Arzobispado de Granada edita un libro que enseña a la mujer a ser sumisa

El arzobispo no ve razones para retirar el libro PP, PSOE e IU, contra el libro ‘Cásate y sé sumisa» editado por el arzobispado de Granada

Aguirre: «El aborto no es un derecho, es un fracaso de la mujer en todos los supuestos»

Femen busca “conformar una armada” en España por los derechos de las mujeres