Intentar mostrar respeto por el visitante ilustre es algo correcto y perfectamente comprensible. En principio, y si queremos que vuelva nuestro invitado, no es
necesario sacar exclusivamente “canapieses” de jamón si el que nos visita es un Rabino o servir “vino del güeno” al Imam de la mezquita del barrio que ha venido a visitarnos, hasta aquí seguro que estamos de acuerdo. Pero la cortesía también requiere una cierta “flexibilidad” por parte del visitante. Ya se sabía de antemano que Hollande no renunciaría al “morapio” en la recepción al Presidente de Irán, por tanto, si acude a Francia entiendo que el visitante concía la costumbre del Elíseo de servir el reconocidísimo vino francés en sus recepciones, aunque con no tomar una gota todo solucionado. Igual no hacía falta llegar a cancelar la tradicional comida oficial ¿no?.
Esto del cruce de culturas es un juego de cortesía mútua que requiere un poco de
respeto por ambas partes aunque algunas veces requiera de cierto juego de equilibrios. Pero de ahí a la soberana barbaridad perpetrada por el primer ministro italiano, Matteo Renzi tapando las esculturas de desnudos por la visita de Rohani se va un mundo. Más que respeto, esta acción me recuerda enormemente a aquello de disfrazar lo que no es para contentar al huesped, igualito que en la genial película de Berlanga con el inolvidable Pepe Isbert “Bienvenido Míster Marshall”.
Eso si, además el señor es reincidente. Cada vez que recibe a un alto dignatario de un país islámico, le da por tapar las esculturas ligeritas de ropa con las que se va a topar
de narices el mandatario en cuestión. Ya lo hizo cuando visitó Florencia (nada más ni nada menos) un principe heredero de Emiratos Árabes Unidos. Figuraos lo que debió hacer para que no se encontrase de frente con los atributos del mismísimo David. Ahora le ha tocado el turno de la “censura decorosa” con paneles blancos a los museos capitolinos de Roma. Todo ello por la visita del presidente de Irán Hasan Rohani. Seguramente al señor Renzi no se le ha pasado por la cabeza aprovechar que como ellos son el país de la moda podía haber vestido alguna Venus de Dolce&Gabanna. Menuda idea! Aunque quedarían “monísimas” no se yo si sería lo apropiado, eso siempre mejor que vestirlas con un Burka.
Estoy seguro que el señor Rohani, que ha recorrido medio mundo sin que le haya
dado un síncope, intuía que le esperaba una visita de esas de “dos rombos” y estaba preparado para encontrarse con unas preciosas estatuas desnudas. Otra cosa bastante más fea sería que las hubiesen tapado para que no saliesen por la tele y no pudiesen ser vistas en Irán. Como queriendo imponer una censura ultra-ortodoxa para que no se conozca la realidad de las cosas en el exterior no vaya a ser que los iraníes descubran que hay vida “más allá” de sus fronteras.
Todo esto me lleva a pensar una cosa que puede que no sea demasiado políticamente correcta pero, como hay confianza yo la suelto. ¿Hasta dónde llega la hospitalidad y

Elmundo.es
el respeto por las otras culturas y empieza el ridículo espantoso? Si nosotros respetamos las costumbres fuera ¿esto no debiera ser recíproco? ¿Hasta que punto el Burka (y sus variantes radicales) , con la falta de respeto a la dignidad femenina que conlleva, debería ser indumentaria habitual en occidente? ¿Debiéramos nosotros ocultar lo que somos, como el alcalde de Villar del Río a la llegada de Marshall, para que no se dé ni siquiera la posibilidad de que pueda aparecer alguna imagen “no apropiada” en otra parte del mundo?









civilizaciones, cuando no había Facebook ni Twitter, cuando las cosas eran más simples y el mundo era mundo, a nuestros ancestros, después de leer las entrañas de alguna gallina les daba por pensar en que los dioses se podían enfadar un rato y enviarnos señales para mayor acogotamiento del que se estaba pasando un pelín.
igual eran los dioses antiguos esos (mucho más expeditivos que hoy en día), que pretendían que volviésemos a mirar otra vez hacia el Norte de África, donde nada ha cambiado. Seguimos con las expulsiones en caliente,


empezó una campaña confiscatoria que les permitiría conseguir liquidez inmediata y de paso humillar y deshumanizar a sus víctimas. Los despojaron de todo, de sus bienes, de sus recuerdos y de su dignidad. Un tiempo después los despojaron de sus vidas.

1200 Euros y que no consigan sobornar al de turno para que les acepte el “valor sentimental” de las joyas de la abuela, se les va a retener el
una verdadera catástrofe humanitaria justo lo mismo que nosotros hicimos desaparecer. Por lo visto a los gobiernos europeos no les basta con hacer sufrir frio, hambre, violencia y abandono a los que dejaron atrás sus tierras huyendo de una guerra de la que, como digo siempre, no se hasta que punto somos inocentes. Ahora, además recuperan las olvidadas fronteras con una alegría que
gobierno hipotético que vamos a tener (aunque todavía va para largo) que haga valer su voz para demostrar que aquí han cambiado las cosas y que pensamos ya está bien de maltratar a seres humanos como podemos ser nosotros mismos en un futuro? Y si recuperamos nuestro orgullo como europeos que se pusieron a andar entre las ruinas pensando que un futuro más humano era posible? O mejor, ¿y si ponemos un poco de humanidad a toda esta locura? ¿No sería una buena forma de empezar a hacer política de forma distinta? Seguramente me quedaré con las ganas. Coincido con Jean Claude Juncker, 






inocencia en los que pedíamos muchas mas cosas aparte de los juguetes con los soñábamos. Nada podía rompernos esa cara de emoción al dejar la carta en el buzón (nunca he sabido que hacían los señores de Correos con ellas, sería cruel que tirasen tanto sentimiento dobladito en cada sobre a la basura). Todo cambió cuando un tiempo después nos robaron los sueños contándonos la mentira esa de que no existen y ese día se nos cayeron los palos del sombrajo. En el más desconsiderado de los spoilers nos dijeron que los Reyes Magos eran los padres. Mienten.
de creer en un futuro digno para todos. Párate a pensar, seguro que conoces algunos, aunque no tengan la pinta de Rey Mago sino la del que se juega la vida en el mar por los que llegan indefensos, el que ayuda en los comedores sociales o incluso el quiosquero de la esquina.
que también existen. Suelen ser los del Gobierno o los abusones que se creen con derecho a robarnos los sueños. Igualito que en la Guerra de las Galaxias (StarWars para los cool), mira tu. Pero piensa que si ellos son el Imperio, nosotros estamos aprendiendo a ser los rebeldes (lo siento, se me ha ido la pinza pero seguro que me entiendes). Sólo es cuestión de creer en ti mismo, sacarte de encima la losa que nos han puesto a todos y levantar la cabeza para tomar aire fresco. Todo está cambiando y tú puedes formar parte de ese cambio. Levántate, sal del hoyo y descubrirás que existen más cosas que nos niegan pero que son nuestras.
elecciones en Cataluña y la CUP que se resiste a entregarse a “lo viejo”, los resultados inauditos en España que casi seguro nos llevarán a unas nuevas elecciones en las que tendremos la oportunidad de reafirmarnos en que estamos hasta las narices y necesitamos otras formas de hacer las cosas. Parece que sólo falta tu aliento para que se avive la llama del cambio frente a los expolios de los que tanto nos hemos quejado.
mago favorito TU. Quiero pedirte ilusión y ganas de romper con el circulo de mugre, injusticia e inmundicia en el que andamos metidos. Por lo menos fuerzas para intentar arrancar fuerte este año que empieza y que promete ser muy emocionante porque ya hemos comprendido que no somos nosotros los que debemos sentir vergüenza y nadie puede hacernos agachar la cabeza. Un año repleto de cambios en el que espero poder estar con vosotros. Un año en el que soñar en volar muy alto como antes hicimos.