Archivos para junio, 2024

El arco iris de Valencia

Publicado: 27 junio, 2024 en actualité...

La verdad es que esto de ser valenciano cada vez se nos pone más difícil. En serio, no entiendo que maldición bíblica nos ha caído encima pero cuando no es el conseller torero es el» molt honorable” o si no la alcaldesa. Esta semana nos ha tocado alcaldesa y su manía por negar, ocultar o ningunear a los que no son de su cuerda“Ninguna semana sin escándalo “ este sería un buen eslogan para la Comunitat, una Comunitat arcoiris, de luz y puertas abiertas, mediterránea, que está viendo como se empeñan en tintar de gris.

Pues resulta que, según la alcaldesa de Valencia, no estaba comparando la homosexualidad con enfermedades. No, no, para nada. Si es que parece que tengamos la mente perturbada. Si, será eso. Según parece ser estaba haciendo un análisis profundo de los días internacionales. Porque, como todos sabemos, cada día tiene su toque internacional. El lunes, por ejemplo, es el Día Internacional de la Siesta (¡viva España!). El martes, el Día Internacional de las Croquetas (¡más viva aún!). Y el miércoles, por supuesto, es el Día Internacional de las Excusas Políticas. ¿Quién no celebra eso en un país donde se cultiva cualquier escusa antes que aceptar que se ha metido la pata hasta el cuello y donde la culpa siempre está en la bancada de enfrente?

Pero, espera, ¿qué pasa con las banderas? ¿Por qué siempre se cuelan en estas conversaciones? ¿Acaso los días internacionales vienen con una bandera de regalo? ¿Es como un Happy Meal, pero con más diplomacia y menos nuggets de pollo? Cualquier excusa es buena para sacar las banderas. Como si las banderas significas en algo, ¿verdad? Como si poner ciertos estandartes conmemorativos significase algún tipo de apoyo a personas como tú o como yo que siguen sufriendo la barbaridad de los Austrolopitecus que siguen sin quererse extinguir. Es como si le diese igual a esta señora colgar la bandera “del pollo” que la del arco uros, bah, banderas según su mente arcaica.

Y luego está el subconsciente. Esa parte traviesa de nuestra mente que se escapa y dice cosas inapropiadas en las cenas familiares. La alcaldesa no contaba con él y se le ha transparentado. Pero, ¿quién lo hace? El subconsciente es como ese tío borracho en una boda: aparece sin previo aviso y arruina todo.

En fin, la bandera del Orgullo. Esa tela colorida que ondea en el ayuntamiento. No, no es una enfermedad. Es solo una cuestión de salud social. La homofobia, por otro lado, es como una alergia: a veces está oculta, a veces es evidente, pero siempre está ahí. Y, por supuesto, empeora cuando alguien se atreve a reivindicar sus derechos. Porque, como todos sabemos, los derechos son como las setas: si los dejas crecer, alguien se va a enfadar. Y si me permites te diré que el que suscribe ya está hasta las narices de los que pagan sus enfados perjudicando a los inocentes.

En resumen, querida alcaldesa, sigue jugando al Tetris con las palabras. Pero recuerda: en este juego, las piezas no encajan siempre como quieres. Y, a veces, el subconsciente te hace un jaque mate como los que hacen los buenos ajedrecistas fríos y despiadado, sin que ni siquiera te des cuenta.

Diplomacia contra genocidios

Publicado: 8 junio, 2024 en actualité...

No recuerdo de quién era la frase aquella que salía en Indiana Jones y la última cruzada en la que se decía que «la pluma es más fuerte que la espada» Pero no dudo en que es verdad. La palabra puede más que cien bombas. Estos días, España, en un acto de valentía sin precedentes, o quizás solo buscando los titulares en vísperas de elecciones, se ha lanzado a la piscina legal internacional, uniéndose a Sudáfrica y otros más en su demanda contra Israel. ¿El motivo? Parece claro, Israel no ha estado jugando limpio con las reglas de la Convención para la Prevención y Sanción del Delito de Genocidio y se ha entregado a la barbarie, el genocidio y el salvajismo, justo ellos que la historia les obligaría a ser ejemplo justo de lo contrario. Y así, con un pie en la historia y otro en la diplomacia, España se convierte en el primer país europeo en decir “aquí estoy yo” en este proceso judicial. ¿Qué quieres que te diga? Debiéramos sentir cierto orgullo con independencia del color de tus preferencias.

Mientras tanto, en el resto de Europa, se están rascando la cabeza, preguntándose si esto es una vuelta de tuerca de estrategia o como dirían por Génova, simplemente España queriendo ser el centro de atención. Porque, claro, reconocer el Estado palestino y ahora esto, parece que España está decidida a liderar el pelotón de la diplomacia, dejando a Estados Unidos, Egipto y Qatar intentando poner paz como quien intenta calmar una tormenta con un paraguas.

Pero no nos emocionemos demasiado, que el gobierno español todavía oficialmente no ha dicho ni mu sobre si realmente cree que Israel ha cometido genocidio aunque todos los que tenemos un poco de vista (y eso que soy miope perdido) lo tenemos claro. Las masacres, las bombas y la hambruna hubiesen justificado hace mucho una actuación sin precedentes de la ONU pero claro, el amigo americano tiene derecho de veto y así, no se puede. Tampoco el tribunal, ese que se toma su tiempo como un buen vino, tampoco ha dicho nada concreto. Así que, para cuando se decidan, probablemente sea tarde y ya no quede nada que salvar en Gaza, pero oye, al menos lo intentaron, ¿no?

Lo que realmente importa ahora no es si se ha cometido genocidio o no, sino parar la fiesta de bombardeos y asegurarse de que la gente en Gaza tenga algo que llevarse a la boca porque eso es lo urgente, salvar vidas. Y a Hamás, pues que suelte a los rehenes, que también es de buena educación.

Y para terminar este sainete, puede que tenga su origen en que Israel le ha cerrado el consulado a España en Jerusalén, donde llevaban desde 1853. Vamos, que Israel se ha tomado la diplomacia española tan en serio que ha decidido castigar a los que menos culpa tienen. España en cambio responde con la diplomacia del siglo XXI, esa que pone a temblar a los gobiernos extremistas y que, al parecer, tiene a Netanyahu contando ovejitas para dormir

Muchísimas gracias, Maruja!

.